José Manuel León Velázquez
Mientras Europa sufría pobreza y hambrunas, en al-Ándalus tuvo lugar un avance imparable de las técnicas aplicadas a las artes agrícolas. A este proceso se le conoce como la revolución agrícola del islam medieval, que introdujo cambios que van del siglo VIII al XIII.
La agricultura en al-Ándalus se vio totalmente influenciada por hechos como la llegada del gusano de seda y el algodón y junto a ellos por el siglo IX, el dominio en el cultivo del arroz, por ejemplo. En al-Ándalus se plantan higueras, manzanos, perales, almendros, azafrán, albaricoques, berenjenas, limoneros, naranjos, caña de azúcar, plátanos etcétera…
También se produjo una amplia difusión de plantas textiles y tintes y todo lo que conlleva esto es una extensión e intensificación del regadío. Los musulmanes impulsaron la técnica del regadío, con novedades tan significativas como la noria, que sirvieron para mejorar la productividad de muchos cultivos e ir introduciendo algunos nuevos.